Constantemente el sector bancario enfrenta controversias, escándalos, denuncias de prácticas abusivas y regulaciones cada vez más estrictas hacia los clientes. En respuesta a esta situación, los interesados en adquirir un préstamo comenzaron a relacionar a los bancos como un mal necesario. Sin mencionar las experiencias indeseables; largas colas, trámites engorrosos, cargas costosas, seguros ocultos y muchas letras chicas.
Sin embargo, con la evolución de la tecnología y los dispositivos electrónicos se logró un importante cambio en el patrón que juegan las entidades financieras. Fue así que se introdujeron nuevas alternativas de financiamiento.
Hoy, con la llegada y crecimiento de las Fintech se ha ampliado por completo las opciones de financiamiento.
La innovación y la industria financiera se siguen desarrollando y la relación de los usuarios con los servicios financieros son cada vez más exigente y los servicios financieros por Internet están tomando la delantera.
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